Más imágenes de Santi Orue al final del artículo
Identificado el hombre, y durante las labores de extracción del cuerpo que había quedado fundido con el butacón, el presidente de su partido le dedicó unas elogiosas palabras alabando su dedicación al pueblo, agradeciendo su disciplina de voto y la inquebrantable sumisión a las listas cerradas.
Los presentes, muchos de ellos nuevos electos, con chándal, bebés colgados de la teta, uno montado en bicicleta y otra con la máscara de Darth Vader, consideraron que el panegírico era de lo más apropiado puesto que el reseco congresista permanecía en posición genuflexa y con el dedo índice congelado en el aire camino del botón del sí.
Acabada la operación, los novatos se jugaron el escaño a Piedra, papel y mechero y lo ganó, con gran algarabía, el joven que llevaba el loro sobre el hombro y la jaula del hámster, porque no había encontrado guardería para ellos.
El semifinalista, un hombre con rastas y una túnica naranja, se vio obligado a sentarse junto a Celia Villalobos con la esperanza de que esta no le pegara las polillas, la caspa o el olor a naftalina.
En el otro extremo del hemicirco, en un sillón oscuro y olvidado, pero confortable, se atrincheró el exdiputado del PP, Gómez de la Serna. ¿O era de la Sarna?
Josetxu Rodríguez
@caducahoy
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tu participación...