viernes, 22 de abril de 2016

En la Audiencia Nacional están como un silbo


LA Audiencia Nacional ha obligado al juez Fernando Andreu a investigar la pitada al himno nacional durante la final de la Copa del Rey sin tener en cuenta que, en 2009, ya habían dictaminado sobre un hecho similar amparándolo bajo la libertad de expresión. Esto me hace sospechar que en ese tribunal hay gente que está como un silbo y quiere acabar con él colapsándolo con expedientes hasta que explosione como la Estrella de la Muerte. 
columna Josetxu Rodríguez, Audiencia Nacional, pitada, final de Copa,

La última vez que pasé por allí como invitado especial del juez Grande-Marlasca, que me tomó declaración por un chiste sobre el rey, temí por mi vida. Y no por el interrogatorio, que fue cordial. De hecho, tuve que ayudarles a reconfigurar el ordenador porque no lograban imprimir el documento para que pudiera firmarlo. El peligro estaba en llegar hasta el despacho salvando aquellos pasillos atestados de archivadores del suelo al techo, llenos de fardos con legajos amarillentos en equilibrio inestable. Uno se sentía como Indiana Jones en el desfiladero de las causas perdidas. Un estornudo habría provocado un alud de papel capaz de sepultarnos a todos y bajo el cual seríamos pasto de los ácaros. 
Eso fue hace años, antes del numeroso desfile de humoristas, titiriteros, corruptos y demás. Si ahora expedientan a los 100.000 espectadores del Camp Nou por silbar, prepárense para el estruendo porque va a ser de órdago.
Josetxu Rodríguez @caducahoy

lunes, 18 de abril de 2016

Sandwich de aeropuerto: sálvese quien pueda


columna Josetxu Rodríguez, sandwich premium, Ibiza,

ES un auténtico escándalo, una tomadura de pelo, algo que indigna profundamente a quienes nos ganamos la conexión de WhatsApp con el sudor de la frente. Me refiero al enriquecimiento ilícito. A ese que se aprovecha de los necesitados o de su situación de debilidad transitoria. Y quienes lo practican no solo son gente como Aznar, el bigote prepotente que evade impuestos envuelto en la bandera rojigualda. O Mario Conde, tan desorientado él: le metieron diez años en la cárcel por llevarse el dinero de Banesto y ahora no entiende que le vuelvan a encarcelar por intentar repatriarlo. Estos son los grandes golfos, la liga profesional. 
Luego están los que andan al menudeo. Como en los aeropuertos. A eso me refería cuando cité la debilidad transitoria. En un aeródromo estamos secuestrados en tierra de nadie, lejos del mundo real. Somos refugiados sin derechos entre la zona vip y el espacio aéreo. Desde ayer, personajes sospechosos que viajan. Sin provisiones, sin agua, a kilómetros de la libre competencia y el comercio minorista. A merced de los especuladores. 
En el de Ibiza, una señora pidió un “sándwich premium” y le sirvieron una loncha de chopped sobre una hoja de lechuga por seis euros. Si lo llega a ver Chicote saca el lanzallamas. Pero no hay quien se defienda ante la ley de la casa: “Tómelo o déjelo, pero tenga en cuenta que su avión lleva un retraso de 9 horas y el precio puede subir”.
Josetxu Rodríguez @caducahoy

miércoles, 13 de abril de 2016

Pobres niños ricos

columna Josetxu Rodríguez,niños ricos, Cáritas

CÁRITAS, esa asociación que despierta nuestras conciencias a bastonazos, como los monjes budistas a sus discípulos distraídos, dice que ya tenemos tres generaciones de indigentes en la misma familia. Que en la cola de la comida y de la ropa se juntan la abuela y el nieto y que “ocho de cada diez niños pobres hoy serán personas sin recursos en el futuro”. Es decir, que en esta península miserable y saqueada la pobreza se hereda. Se contagia como una enfermedad que ha quebrado esa ley que auguraba que los hijos siempre vivirían mejor que los padres. 
Curiosamente, algo similar sucede con los ricos. El 90% de los niños multimillonarios lo serán en el futuro, sin que puedan hacer nada por evitarlo. Menuda papeleta tienen los pobres. La lista Forbes está en España tan concurrida que parece la cola del paro y hay auténticas peleas por mantener el escalafón. Tanto es así que muchos de los herederos no conseguirán ser más opulentos que sus progenitores ni aunque se roben a sí mismos. Y lo peor de todo, es tal el volumen de su fortuna que esta situación afectará a diez o doce generaciones venideras. 
Para una mente no formada, esta dicotomía podría parecer obscena, inmoral e, incluso, criminal. Pero no es así, simplemente es neocapitalismo salvaje. Como dice la televisión, quien no tiene 100 o 200 millones de euros en Panamá es porque no quiere. Hay mucho zángano suelto por ahí.
Josetxu Rodríguez @caducahoy

viernes, 1 de abril de 2016

¡Este tío es una bomba!


columna Josetxu, secuestro, avión, selfie, columna Josetxu, secuestro, avión, selfie,

Un pasajero inglés y una azafata se hacen fotos con el secuestrador del avión egipcio.




IMAGÍNENSELO. Todos metidos en un avión egipcio y, de pronto, un señor de tez oscura lo secuestra para ver a su mujer bajo la amenaza de hacerlo volar por los aires. Y en medio del caos se levanta un joven inglés y dice que ese tío es la bomba y que quiere hacerse una foto con él para la posteridad, por breve que esta sea. Y el secuestrador se encoge de hombros y se queda allí quieto con cara de fotomatón mientras van pasando pasajeros y azafatas para inmortalizar el momento. 
Y el hombre cada vez más mosqueado, porque le empiezan a pedir prestado el cinturón explosivo para ponérselo. Y claro, como en realidad son carcasas de móviles atadas con cinta aislante, se descuajaringa, lo que mosquea a los que hacen cola para el selfi
Es normal. ¿Quién no ha querido tener en la mesilla de noche una foto con un terrorista? Son cosas de la rutina, que se banaliza el horror y terminamos congeniando con cualquiera. Me pongo en la piel de Seif Eldin Mustafa, totalmente agobiado con el pasaje, gritándoles: “¡Oigan, terminen con las fotos, por favor, que yo tengo que explotar!”. Y ni por esas. 
Fue tanto el trajín que, al final, la policía no sabe si ha detenido al autor o a un turista que se quedó el explosivo simulado de recuerdo, posiblemente con la intención de vender réplicas dado el éxito que tienen. “No es un terrorista, es solamente un idiota”, dijeron del presunto. Como cualquier hombre enamorado, añado, sin temor a equivocarme.

Josetxu Rodríguez / @caducahoy